Este blog es un experimento donde Havoc, LoveBuzz y Schaduwplek comentan textos ajenos. Para ver las normas que "siguen" visita la introducción del blog.

Comentario de Schaduwplek al texto 4

Podéis encontrar el texto 4 aquí.



El placer del sufrimiento ajeno, esto es lo que plantea este texto del siempre magnífico y ofuscado Nietzsche. Puede parecer inmoral o cruel, o podemos creernos demasiado buenos para ello, pero pensémoslo bien y nos daremos cuenta de que está mucho más presente en nuestras vidas de lo que nosotros mismos podemos llegar a creer. Por poner un ejemplo, ¿por qué nos da tanta risa ver a alguien que se cae por la calle? No lo neguéis, a todos nos da risa; y “es divertido” no es una respuesta argumentada. Simplemente nos gusta ver a alguien sufrir, no tiene que ser un sufrimiento físico muy alto por que entonces nos sentimos mal, pero una ligera humillación pública, y eso es también una forma de sufrimiento, siempre es divertida. Desde los gladiadores romanos a los boxeadores modernos, que aunque en casos concretos se disfrute por la calidad de la técnica, en la mayoría de los casos es solo por que es una forma socialmente aceptable de ver a dos hombres sufriendo. Por poner casos más triviales, el Gran Prix o Humor Amarillo tuvieron éxito en su momento principalmente por la gracia de ver a gente sufriendo, y recuerdo caídas muy dolorosas, y por lo tanto muy divertidas.

El autor centra parte del texto en el castigo y la venganza. La gran pregunta es ¿por qué nos alivia el sufrimiento recibido el infringir un sufrimiento (proporcionado o desproporcionado, es a grosso modo la diferencia entre castigo y venganza) al que nos lo ha ocasionado? La respuesta es difícil, aunque sospecho que está muy relacionado con el párrafo anterior.

Y es que, como apunta Nietzsche, “ver sufrir produce bienestar; hacer sufrir, más bienestar todavía”. Hasta que punto es eso cierto, no lo puedo asegurar con certeza; pero lo que sí que está claro es que “sin crueldad no hay fiesta”, amigos.



Schaduwplek

1 comentarios:

Adrián García dijo...

Me he retrasado dos días y pido disculpas por ello; pero he de destacar que mis compañeros aún no han publicado nada.

Publicar un comentario